En los últimos tiempos no ganamos para
alegrías judiciales. Después de todas las noticias sobre el caso de la Manada,
hoy se ha hecho pública la condena de Juana Rivas por sustracción de menores. Cinco
años de prisión; es decir, que entrará en la cárcel sí o sí salvo que ocurra
algo excepcional, como un indulto. Además, seis de privación de la patria
potestad, que pasará con toda probabilidad al maltratador condenado de su ex
marido.
Este caso siempre me ha producido un nudo
en la garganta, porque Juana Rivas me da mucha pena. Esta condena estaba cantada
porque es bastante obvio que esta mujer cometió el delito. Sin embargo, salvo
que uno tenga una moral puramente iuspositivista, su comportamiento es de lo
más comprensible. ¿Cómo puedes esperar que una persona actúe de manera
racional, sensata y legal cuando la pones entre la espada y la pared? Por un
lado, la comisión de un delito; por otro, dejar a tus propios hijos en manos de
un maltratador. No es una decisión nada fácil.
Por desgracia, Rivas no está recibiendo
el apoyo que merece, y eso es entre otras cosas por esa moral iuspositivista a
la que me he referido antes. No la tenemos tanto en su versión fuerte (“todo lo
legal es bueno y todo lo ilegal es malo”) como en su versión débil (“cumplir la
ley es un imperativo ético aunque ésta sea injusta”). De estos últimos hay a
cascoporro. Gente listísima que dice que mientras la ley sea la que sea hay que
cumplirla, que afirma que lo lamenta por Juana “pero que no se queje”, que
reclama sosiego a la hora de abrir el debate o que incluso te cita artículos legales
sobre el principio de legalidad.
No me digas, Sherlock. Ya sabemos que
cumplir la ley es jurídicamente obligatorio (por eso es ley), y ya sabemos que
cuando no se cumple se arriesga a una sanción (de nuevo: por eso es ley). Pero eso
no significa que la ley sea una fuente de valores éticos. Hay veces en que
cumplir la ley es malo y en que el incumplimiento está, no ya justificado sino
incluso exigido. Y además, que aquí no hablamos de una objeción de conciencia
largamente meditada y asentada en principios sólidos, sino de una huida por
miedo y por pura necesidad de proteger a los hijos. Cuando Juana Rivas huyó con
sus hijos no podía permitirse el lujo de un debate civilizado sobre las
virtudes y defectos del sistema de protección a las víctimas de violencia de
género.
Se ha dicho que Juana “ha estado mal
asesorada”. Cualquiera que haya seguido el caso se ha encontrado con esta
afirmación, que ha crecido hasta alcanzar el nivel de tópico. Yo no me atrevo a
sostenerla. Me pongo en el lugar de sus abogados y de verdad que no me resulta
posible defender en serio que el consejo razonable y legalista (“entrégale los
niños a tu ex, denuncia lo denunciable y espera a que se resuelva”) es la mejor
vía de actuación. Sé que en abstracto lo es, pero ¿con qué cara se lo dices a
alguien tan desesperado?
Otra cosa que se suele decir es que los
jueces necesitan formación en género. Estoy de acuerdo. No sé yo si en este
caso habría marcado alguna diferencia (insisto en que Juana Rivas cometió un
delito), pero es algo que nos beneficiaría mucho como sociedad. Ahora bien, el
problema es que a veces te encuentras con jueces que son abiertamente
refractarios a esta formación. El que le ha tocado a Juana parece uno de éstos:
hay quejas sobre él por este tema desde 1999, en Granada le conocen como "el nazi" y tiene un largo historial de sentencias muy discutibles.
¿Qué hacemos con esta gente? ¿Qué hacemos
con jueces que juzgan casos donde hay implicada violencia de género y se
atreven a hacer la preguntita retórica de que por qué no denunció si tanto
maltrato sufría (FJ 1)? Uno se pregunta hasta qué punto el desconocimiento
se convierte en maldad. Porque no me resulta creíble que un juez en el siglo
XXI no sepa que el maltrato nunca es cuestión de una vez y que convencer a una
víctima de que denuncie es normalmente tarea de titanes. Y ya cuando se atreve a poner negro sobre blanco que Juana Rivas se dedica a "explotar el argumento del maltrato"...
En fin. Esta sentencia llega unos días
después de saber que la ONU ha condenado a España a pagarle 600.000 € a una
mujer cuya hija fue asesinada por el padre de ésta en una visita no vigilada
pese a las múltiples denuncias de maltrato. Esperemos que el caso de Juana
Rivas no sea idéntico. A mí al menos no me llega la camisa al cuerpo.
Voy a intentar hablar del tema a sabiendas que no estoy puesto en el mismo, que no se de leyes ni de jueces, y de género tampoco presumiré. El punto de como impedir que lleguemos a este punto por jueces sin formación que no quieren recibirla. ¿Sería posible ya no solo formar a la judicatura en violencia de género y feminismo sino retirar de este tipo de casos a estos jueces sin caer en ninguna decisión que pudiera interpretarse como manipular el poder judicial para que cumpla lo que te interesa a ti? ¿Hay manera de que se haga un cambio tan amplio y consensuado para que no se pueda acusar al mismo de "golpe de estado"? ¿Que se acepte de una vez de manera real la gravedad del problema que tenemos entre manos y la necesidad de afrontarlo con conocimiento?
ResponderEliminarEs muy jodido eso que planteas :/ Una vez que un juez obtiene su plaza es casi imposible moverle de ahí, y bien está que sea así porque la justicia debe ser independiente. Al final la única forma es seguir educándolos, esperar que cale... y, tristemente, asumir que tipejos como el nazi que le ha tocado a Juana Rivas (no se lo llamo yo; en Granada los profesionales le conocen por ese sobrenombre) siempre se te pueden colar.
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ResponderEliminarTus insultos hacen perder fuerza a tu opinión; se puede decir lo mismo pero de manera razonable y sin ofender a los demás que también aportan su opinión... eres un hooligan, no deberías estar aquí, tú eres más de for...ches.
EliminarLos trolls es que son así xD
EliminarImpresionante! Nunca pensé que en este blog pudiera practicarse la censura de manera tan descarada...
Eliminarhttps://asihablociceron.blogspot.com/2016/09/tres-apuntes-sobre-la-libertad-de.html
EliminarCuriosísimo como la gente se indigna por banear a alguien de una página que es propia. ¿Acaso este tipo de conductas se permiten en otros sitios como una clase o una reunión familiar?
EliminarQue no, que no, que es censura :p Vamos, soy una mezcla de inquisidor general y miembro del comité de censura franquista.
EliminarLa sentencia no es firme y van a recurrir. Espero que no vaya a prisión preventiva, pero con el juez este cualquier cosa es posible. Ahora mismo, ¿cuál es la manera más eficaz de ayudar? ¿Pedir el indulto?
ResponderEliminarHombre, prisión preventiva lo dudo. Si no la ha habido hasta ahora...
EliminarDe momento esperaría a ver si con el recurso se aprecia la atenuante o eximente de estado de necesidad, que entiendo que es casi la única línea de argumentación que tiene la defensa. Y si no se aprecia, sí, esperar el indulto.
Espero que sea así, de verdad. Gracias por la respuesta.
EliminarUna pregunta: ya que parece evidente que la pobre Juana ha sido mal asesorada, ¿no debería denunciar a sus (ex) asesoras por pura coherencia? De lo contrario, estará asumiendo que todo lo hizo siendo plenamente consciente...
ResponderEliminarYo ya digo que no me atrevería a calificar a las asesoras de Juana. En todo caso, evidentemente puede demandarlas, pero yo no haría derivar ninguna consecuencia del hecho de que no lo haga. Puede no querer meterse en más fregados.
EliminarLo triste de todo esto es que las únicas víctimas reales de todo este circo han sido los niños de la pareja... Menuda desgracia: el padre maltratador y la madre secuestradora. Tendrán suerte si salen adelante sin ningún trauma...
EliminarIdéntico, oiga, el padre maltratador y la madre que huye del maltratador.
EliminarEso sí, tienes razón: ahora que van a pasar a la custodia del padre, tendrán suerte si salen adelante sin ningún trauma. Y vivos.
A mí también me da mucha pena. Todo se le ha girado en contra a Juana Rivas: un marido maltratador, un abogado que renuncia, un juez retrógrado, una asesoría dudosa y estar, como dices, entre la espada y la pared.
ResponderEliminarEs evidente que al juez no le quedaba otra que condenar a Juana Rivas pero los comentarios con los que adorna la sentencia son bochornosos.
https://blogs.publico.es/dominiopublico/26165/la-letra-pequena-de-la-sentencia-de-juana-rivas/
No soy juez ni tengo idea de leyes pero según mi entendimiento antes de lanzar semejantes acusaciones contra la condenada debería tener claro que esas acusaciones son ciertas.
Es que es eso. La condena estaba cantada (siendo realistas, la eximente de estado de necesidad es relativamente difícil que triunfe en estas circunstancias), pero los comentarios y asunciones son telita.
EliminarSe te ha olvidado comentar que después de su primera denuncia por maltrato y condena al maltratador (habría que ver si eran bofetadas o una simple discusión) VA A BUSCAR AL EX POR INICIATIVA PROPIA A REINO UNIDO y tiene un hijo con él.
ResponderEliminarYa que buscas información sobre las quejas de un juez machista, infórmate también de la edad de sus hijos y la cronología de sus denuncias y su vida.
Y ya no entro en el debate de que lo buscó como último recurso porque otros no querían estar con ella.
El maltrato no es cómo supones que es.
EliminarAqui hay un análisis bastante completo de este caso: https://www.youtube.com/watch?v=6zHuVIudzZg que me parece muy interesante.
ResponderEliminarA Juana Rivas la han aconsejado muy mal, porque la han utilizado como mártir para la causa feminista, sin tener en cuenta lo que a ella realmente le convenía
Fíjate que antes de abrir el vídeo ya sospechaba que iba a ser una de las deposiciones de Un Tío Blanco Hetero. Me disculparás si lo cierro sin verlo.
EliminarUna pregunta, en el supuesto que la condena impuesta se mantenga en instancias superiores y sea firme, ¿como la pena de prisión y de patria potestad se puede cumplir a la vez, "solo" tendría que estar, una vez que la cumpla (descontando la libertad condicional), los 5 años, un año más para recuperar la patria potestad o se tendrían que cumplir sucesivamente?
ResponderEliminarEs el primer supuesto; las condenas que sean compatibles (en este caso una prisión y una inhabilitación) se cumplen de forma simultánea.
EliminarTodo el razonamiento se basa en que el hombre es maltratador. Hecho no demostrado.
ResponderEliminarFue condenado por maltrato.
EliminarLeete, como cuando y por que fue condenado por maltrato y luego vienes y nos dices que fue condenado por maltrato y es un maltratador.
EliminarTranquilo, se que no lo vas a ahcer, como ninguno lo haceis, por que sabeis que no es un maltratador, pero es la unica cosa a la que os podeis agarrar para apoyar a la secuestradora de niños.
Señor, por favor, deje de dar la brasa.
EliminarEl marido fue condenado por maltrato, pero no es un maltratador ¿como es eso posible?, no se, quizas si perdierais 5 minutos en investigar un poco sobre ese caso, como se produjo el "maltrato", como el marido acepto los cargos y por que, etc etc, entonces veriais absurdo decir que es un maltratador, y aun mas usar eso como piedra base para defender a una secuestradora de niños que esta medio loca.
ResponderEliminarPero claro eso podria desmontaros la pelicula y haceros enfrentar una realidad incomoda donde el marido es la victima y la "pobracita ser de luz" resulta que no es tan buena y pobrecita.
Ah, bueno, si aceptó "los cargos" entonces es que no los cometió, claramente.
Eliminar¿Todo aquel que acepta los cargos es cupable?
EliminarMás base que sostener que es inocente ya tiene.
EliminarVimes,
ResponderEliminarEstás de acuerdo con que se permita a Juana estar con sus hijos en Italia? No es ilógico puesto que la han condenado por secuestro?
Ni siquiera sé si eso ha pasado, porque los comentarios de esta entrada me han dado tanto asco que me he alejado mucho del caso Juana Rivas. En consecuencia, me permitirás que no opine. Solo un apunte jurídico: hasta que no sea firme la condena, no puede ejecutarse.
EliminarVimes: piensas comentar algo sobre las últimas novedades de este caso? Parece que las cosas no eran como nos las habían contado...
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