A veces Twitter tiene cosas muy buenas. Una
de las mejores, últimamente, es la iniciativa #LeoAutorasOct, que
consiste en dedicar el mes de octubre a visibilizar la narrativa escrita por
mujeres. Creo que mi TL de Twitter empezó a hablar del tema a partir de este artículo de hace un año, cuya autora
llevaba un tiempo leyendo sólo libros escritos por mujeres. Su conclusión era: “no
siento que esté renunciando a nada, sino que se ha abierto ante mí un panorama
totalmente nuevo que me sorprende cada día”. Desde aquel momento tomé la
decisión de buscar activamente libros escritos por mujeres en los géneros que
más frecuento… y puedo decir que coincido plenamente.
Así
que, aprovechando el #LeoAutorasOct, voy a aprovechar para recomendar unos
cuantos títulos de ciencia ficción feminista escrita por mujeres (1). Definimos
la ciencia ficción feminista como aquella que trata como tema principal las relaciones
de género y el papel de las mujeres. Al ser literatura especulativa, escribe
normalmente sobre mundos cuya construcción del género es distinta de la nuestra.
El objetivo es hacer contraste con la realidad e inducir a la reflexión… al
tiempo, por supuesto, que se cuenta una buena historia.
Recomiendo
los libros sin ningún orden en particular (salvo el primero) y luego incluyo una
breve reseña en la que explico por qué lo he incluido.
1.
La puerta al país de las mujeres (Sheri S. Tepper, 1988)
Después de un desastre nuclear, la
sociedad se ha fragmentado en ciudades amuralladas. En las ciudades viven las
mujeres, los niños y un pequeño grupo de hombres, los servidores. Fuera de las
ciudades, en campamentos militares, viven los varones, que tienen como misión
proteger las ciudades. Pero no todo el mundo está de acuerdo con ese nuevo orden.
Mi favorito de toda la lista. Lo leí este
verano y desde entonces no he parado de recomendarlo, hasta el punto de que me
he querido cortar para no provocar el efecto contrario. Una sociedad creíble,
unos personajes vivos y humanos (tanto los buenos como los malos, e incluso los
secundarios), una trama que avanza con ritmo, un final impactante…
Que dejes de leer este post y te vayas a
leer la novela, hombre ya.
2. El cuento de la criada (Margaret Atwood,
1985)
EE.UU. se ha convertido en un Estado teocrático,
gobernado por una interpretación literalista de la Biblia. El matrimonio es
sagrado, pero hay un problema: las cotas de fertilidad son muy bajas. Para ello
existen las “criadas”, vestidas de rojo y sin nombre propio, que viven en las
casas de los gobernantes del país y tienen la obligación de quedarse
embarazadas de ellos.
Atwood no llama “ciencia ficción” a lo
que escribe, pero creo que podemos englobarlo como tal sin mayor problema. Aquí
la autora tira por el lado contrario que Tepper: nos muestra un mundo donde las
mujeres han perdido por completo todos los derechos ganados en siglos de lucha
y han vuelto a ser consideradas como propiedades. La novela trata,
precisamente, de la vida cotidiana de una criada en contraste con sus
recuerdos: Defred, la protagonista (2), era una mujer normal antes de la
dictadura, y se acuerda de cómo progresivamente se fue jodiendo todo.
3. La mano izquierda de la oscuridad
(Ursula K. Le Guin, 1969)
En el planeta Gueden no hay sexos. Los habitantes
son completamente andróginos durante tres semanas al mes; la cuarta, fluyen a
machos o hembras. Nadie sabe qué genitales le tocarán en cada transformación,
por lo que no hay una construcción del género. El protagonista, un
humano enviado para conseguir que Gueden se incorpore a una federación del
mundo, comprueba la cantidad de cambios culturales que se derivan de este
hecho biológico.
Aquí ni mundos dominados por mujeres ni
patriarcados rampantes: Le Guin directamente se carga los géneros. Los habitantes
de Gueden tienen grandes dificultades para hacer una oposición radical entre “yo”
y “el otro”, porque en cualquier momento pueden todos ellos ser el otro. En consecuencia,
no se han desarrollado los grandes sistemas ideológicos que tenemos en la
Tierra (religiones, nacionalismos) y las guerras son muy escasas y por puras
razones materiales. El mundo no es utópico, pero proporciona mucho material
para la reflexión.
4. Amanecer (Octavia Butler, 1987),
5. Ritos de madurez (Octavia Butler, 1988)
6. Imago (Octavia Butler, 1989)
Los libros de la trilogía Xenogénesis. Los
incluyo como tres títulos distintos porque, al contrario que otras sagas (como
CDHYF), no son un libro muy gordo dividido en varias partes. Son verdaderamente
tres historias, cada una protagonizada por un personaje distinto, aunque los
personajes principales de la primera novela aparecen como secundarios en las
otras dos.
De nuevo una guerra nuclear ha devastado
la Tierra, pero aquí la salvación no viene de la división en ciudades sino de
los oankali. Los oankali son una especie extraterrestre, experta en ingeniería
genética, que viaja por la galaxia en grandes naves biológicas. Son comerciantes:
cuando encuentran una especie nueva, mezclan su ADN con el de ésta para
conseguir mejoras. De los humanos, por ejemplo, les fascina la capacidad
multiplicadora de las células cancerígenas, que ellos son capaces de usar para
propósitos curativos. Ah, y las familias oankali se basan en tríadas de macho,
hembra (normalmente hermanos entre sí) y ooloi, el sexo que media en los
intercambios sexuales y que permite la fecundación.
Pues bien: los oankali rescatan a los
pocos humanos que quedan vivos después de la guerra (la mayoría, por cierto,
del sur del planeta, que no se ha visto tan afectado) y preparan el
intercambio. Los humanos se unirán en quintetos con una tríada oankali y la
prole de esas familias tendrá características de ambas especies. Pero no a
todos les acaba de convencer la idea de que la humanidad desaparezca y se funda
con unos seres tan obvia y repulsivamente extraterrestres.
La trilogía toca muchos palos, aparte del
tema del género y de su función como constructo social. Por poner unos pocos
ejemplos: orientación sexual (la mayoría de los hombres sienten asco
instantáneo ante la idea de seres que leen como masculinos dándoles placer
sexual), cuestiones raciales, preguntas profundas sobre qué nos hace humanos
(según los oankali, una combinación tremendamente destructiva de inteligencia y
jerarquía), la libertad contra el paternalismo, la monogamia… y todo con un
lenguaje cuidado y precioso. Merece muchísimo la pena. No esperéis, eso sí,
acción a raudales. La trama fluye lenta y los tres libros pueden hacerse un
poco pesados en algunos pasajes.
7. El hombre hembra (Joanna Russ, 1970)
Cuatro mujeres, cada una en un universo
paralelo, viven sus vidas e interactúan entre sí: la primera en los EE.UU. de
los años ‘60, la segunda en un mundo opresivo que continúa en plena depresión
económica, la tercera en una sociedad sin hombres y la cuarta, una asesina, en
una Tierra en la que se ha desatado una guerra de sexos.
Esta novela es una de las fundadoras de
la ciencia ficción feminista, quizás una de las primeras que se te vienen a la
cabeza cuando piensas en esta corriente. Sin embargo es, quizás, la que menos
me gustó de todas las que reseño. No sé si es porque está contada de una forma
un tanto liosa o porque los temas que trata suenan algo desactualizados, pero
no conseguí entrar en ella. Aun así, la incluyo en la lista porque son los orígenes del
género.
8. Memorias de una mujer del espacio (Naomi
Mitchinson, 1962)
Es más una colección de relatos
interconectados que una novela. La protagonista, Mary, es una exploradora que
viaja entre distintos mundos tratando de aumentar los conocimientos de la
humanidad e interferir lo menos posible en las sociedades que visita. El libro
es una retrospectiva (3), donde Mary cuenta sus relaciones de amistad, amorosas
y sexuales con miembros de distintas especies, y las distintas ocasiones en que
ha sido madre. Aparte de, por supuesto, los enigmas científicos a los que se ha
enfrentado en cada planeta.
He dudado sobre si meter este libro aquí.
No lo recuerdo demasiado bien (lo leí hace año y medio), pero creo que las
cuestiones de feminismo estaban más en el trasfondo que en la trama. La protagonista
tiene la oportunidad de ser líder de expedición y no se ve mal que se acueste
con seres de distintas especies o que sea madre cuando ella lo decide. Creo que
eso justifica su inclusión en la lista.
En fin, esto ha sido todo por hoy. Las ocho
obras que he citado merecen la pena, cada una en sus propios términos. Si vas a
hacer el #LeoAutorasOct, o simplemente si quieres probar algo diferente, ¿por
qué no les das un tiento?
(1) Sí, también la hay escrita por
hombres, como Theodore Sturgeon.
(2) He dicho que las criadas no tienen
nombre, y efectivamente ésta no lo tiene. Se llama Defred porque es la criada
de un hombre que se llama Fred. Cuando sea traspasada a la casa de, yo qué
sé, Mike, se llamará Demike.
(3) Sus primeras palabras son “Pienso en
mis amigos y en los padres de mis hijos. Pienso en mis hijos, pero pienso menos
en mis queridos cuatro seres normales que en Viola. Y pienso en Ariel. Y en el
otro”.
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El único que he leído es "La puerta al país de las mujeres". Coincido contigo en lo de los personajes (creo recordar que había un grupo secundario de itinerantes o algo así, recuerdo que me encantaron), en la trama y en el tremendo PLOT TWIST del final (creo que me eché a reír por no haberlo visto, porque una vez lo sabes te das cuenta de las pistas, mis dieces a la escritora). Ahora bien, con este libro tengo una espinita clavada: por el determinismo biológico que muestra (ugh) y muy especialmente por la ¿única? mención que hay a la no heterosexualidad. No recuerdo si hay más, hablo de la charla entre los Hombres™. Sinceramente, espero que aquello solo sea por la visión de los Hombres™, y que la ciudad de las mujeres tuviera otra visión. Porque si no me dolería bastante.
ResponderEliminarEl hombre hembra lo intenté leer una vez y me pareció muy lioso, la verdad, no avancé mucho (además me cogió en una época en la que estaba bastante vago para leer libros). Supongo que se merece otra oportunidad.
Del resto de libros solo conocía el de Le Guin, que me lo recomendó un amigo fanísimo de esa escritora. Me parece súper atrayente y tengo ganazas de leerlo.
Lo de la homosexualidad eres la segunda persona que me lo dice (o igual eres la primera que me amplía la información y te ha salido el comentario como anónimo xD), y bueno, lo cierto es que no recuerdo demasiado esa mención, supongo que porque lo asumí como parte de la opinión de los Hombres (TM), no de la autora.
EliminarEn todo caso, supongo que nunca se puede compartir por completo toda la ideología de un libro. Y el resto de cosas compensan esa deficiencia. Flipé con el giro de trama del final y me encantaron los personajes secundarios itinerantes, por cierto.
Y bueno, dale al de Le Guin. Te advierto de que es una autora que a veces es algo lenta, pero el libro merece la pena.
Estimado Vimes, antes de nada quería mostrarte mi admiración hacia tu blog, descubierto de casualidad, y donde creo que haces un trabajo magnífico acercando (entre otras cosas) el ámbito jurídico al público no especializado, entre los que me encuentro.
ResponderEliminarDicho lo cuál, y perdona que me salga del tema de este artículo, quería perdirte, si fueras tan amable, tu opinión (jurídica) respecto a la previsible sentencia al recurso contra la prohibición de los toros en Cataluña. Y en la línea del TC, quería saber tu opinión respecto a la despolitización de la justicia, cómo se podría mejorar, y la comparativa con otros países.
Muchas gracias y perdona las molestias,
Carlos
¡Gracias! No sé si hablaré de esos temas (el primero no me llama mucho y el segundo me resulta demasiado general), pero te agradezco las sugerencias. Me las apunto y veo si les puedo dar algún enfoque interesante.
EliminarPues el tema de los toros está creando muchos independentistas en catalunya. Nos queremos ir porque con españa ya hemos perdido toda esperanza.
EliminarMe quiero ir hasta yo, que soy de Madrid... xD
EliminarMe los descarg... digo, me los apunto XD
ResponderEliminarNo es ciencia ficción pero me encanta "la nieblas de avalon". La historia del rey arturo y compañia contada desde el punto de vista de las mujeres.
Descarga, descarga xD Yo la mayoría me los descargué.
EliminarNo lo he leído, pero no dejan de recomendármelo.
Tal y como dices no se las conoce todo lo que merecerían(una pena), al menos yo, aunque debo decir que estoy algo cruda en ciencia ficción. Pero al menos una de ellas, Úrusla K. Le Guin, sí la conozco. La última reseña que hice fue de Los Desposeídos y ME ENCANTÓ.
ResponderEliminar"Los desposeídos" es brutal. Yo lo leí hace años y me dejó flipando. Este año lo he releído y le he sacado mucho más jugo. Creo que es un libro que admite muchas relecturas, como la mayoría de los de Le Guin.
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