¡Basta
ya de tiranía del lobby rosa!
Todos
los años, el 28 de junio, la calle se llena de invertidos y bolleras
reivindicando unos estereotipos que nos dan asco y vergüenza ajena. Locazas,
camioneras, osos y dracuins se dan cita en un espectáculo dantesco y reñido con
el buen gusto, la decencia y la moral de este país. Un show grotesco, sin
teología ni geometría, donde incluso se hacen gestos obscenos y salen personas
que no parecen ni hombres ni mujeres. ¡Ni hombres ni mujeres! ¿Qué va a ser lo
siguiente, perros y gatos cohabitando?
La
corrección política nos impide reaccionar. Pero ha llegado el momento de romper
nuestras cadenas mentales y manifestarnos. ¡Reivindiquemos lo nuestro!
Reivindiquemos al gordo en el bar, al yuppie estresado y trepa, al párroco
católico, al acosador del metro, al macho ibérico... en definitiva, a tantos y
tantos iconos de la heterosexualidad rampante, de la normalidad y la decencia
que hoy están en retroceso. A tantos y tantos hombres normales, como nosotros y
nuestros cuñados. ¡Si los gays tienen el derecho de sacar a pasear sus
asquerosas vergüenzas por las calles, nosotros también!
No
debe entenderse esto como un acto de intolerancia. Los abajo firmantes queremos
dejar claro, siempre desde el respeto, que toleramos y respetamos la
homosexualidad, el lesbianismo y demás opciones sexuales, que son tan
respetables y tolerables como cualquier otra cosa digna de respeto, aunque en
muchos casos sean una fase o se sigan por moda. Algunos de nosotros incluso
tenemos amigos gayses, y son tela de divertidos. Pero, ¿tienen que demostrar su
sexualidad a cada momento? Nosotros la respetamos y la toleramos, como ya hemos
dicho, pero siempre que se quede en privado. Sentido común, joder, que a nadie
le importa lo que hagas en tu cama. Salvo si sois una pareja de lesbianas y os
pido hacer un tr(*esta parte está emborronada*)
Además,
al fin y al cabo, ¿qué necesidad hay de un Orgullo Gay? Ni que los gays
estuvieran discriminados en la sociedad occidental. ¡Que lo celebren en Moristán
si es que tienen huevos! Claro, para pasear su depravación delante de los niños
blancos y morrearse en la calle sí tienen valor. Y todo eso para nada porque,
como ha quedado sentado, no hay nada que reivindicar: todos aceptamos su
existencia y ya ni siquiera existe la Ley de Vagos y Maleantes. ¿De qué se quejan?
¡Si hasta pueden casarse!
Por
todo ello, los abajo firmantes, recogiendo el sentir popular expresado en las
tabernas de toda España, hemos decidido convocar el Día del Orgullo
Heterosexual. Hemos designado para tal fin el 12 de julio, Día de la
Testosterona: ese día se hará una manifestación para exigir nuestra visibilidad
en un mundo cada vez más rosa. Si los gays celebran en su día que algunos de
ellos fueron amonestados por la Policía (algo harían), nosotros conmemoramos
algo más importante: la victoria de España en el Mundial de Sudáfrica.
¡Venceremos!
Testosterona Power.
"A tantos y tantos hombres normales, como nosotros y nuestros cuñados." JAJAJAJAAJAJA
ResponderEliminarPobres cuñados, que en los manifiestos siempre se olvidan de ellos.
Eliminarhostia, pues a mí me sienta mal ver un montón de yuppies que se han beneficiado de la lucha feminista y ahora nos miran a las mujeres por encima del hombro, saliendo a la calle para bailar en vez de para recibir golpes como hacemos el resto de luchadores.
ResponderEliminaren realidad me quiero referir al homopatriarcado que también se nota, se siente, está presente en el ambiente.
EliminarNo termino de entender a qué te refieres en el segundo comentario...
Eliminarsi vasta ya de ver cuadros dantescos en nuestras calles estamos dejando que el infierno camine entre nosotros y no estamos reaccionando
ResponderEliminarBueno, tú un poco reaccionario sí que eres, ¿eh?
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