Una de las cosas que más me gusta de
Twitter es ver cómo crecen y se desarrollan proyectos interesantes. Mi favorito
ahora mismo es Todas Gamers, un blog acerca de videojuegos escrito
íntegramente con mujeres y con perspectiva feminista. Han arrancado fortísimo,
con dos o tres artículos diarios y un enorme plantel de colaboradoras. En sólo dos
meses ha conseguido obtener una cantidad de visitas importante y generar una comunidad
activa a su alrededor (1). Por supuesto, y como siempre que se analizan las
frikadas desde el punto de vista feminista, ha surgido una importante corriente
de trolls que trata de hundir el proyecto.
El artículo que más ha escocido hasta
ahora es un texto (en realidad bastante suave y medido) donde se
argumenta acerca de los sesgos machistas de The
Witcher III. Esos dos nidos de imbéciles que son Forocohes y Menéame, a los
que esta vez se agregó el foro de Meristation, bramaron contra la crítica. Por supuesto,
la mayoría de argumentos eran estupideces: mi favorito es el que habla de
realismo histórico… en un juego ambientado en un mundo ficticio (2).
Al hilo de esto he estado pensando. En la
ficción hay dos tendencias que se suelen poner juntas: la fantasía y la ciencia
ficción. La distinción entre una y otra nos podría ocupar varios artículos o
incluso una tesis doctoral, pero a efectos de este post diremos que una
trata sobre el pasado y la otra sobre el futuro. La fantasía utiliza elementos
provenientes de las creencias que ha tenido el ser humano en diferentes momentos (mitología, magia, criaturas fantásticas) y construye sociedades más o menos
basadas en la historia. La ciencia ficción, por el contrario, es una
especulación acerca de cómo evolucionará nuestra especie en el porvenir.
Eso me ha hecho plantearme una hipótesis:
¿sería posible que la ciencia ficción fuera un género más “progresista” y la
fantasía uno más “conservador”? Por supuesto, hablamos de corrientes que tienen
décadas de historia a sus espaldas, por lo que todo lo que se diga será una
generalización y se podrán encontrar contraejemplos a porrillo. Sin embargo,
creo que no soy yo el único en pensarlo. Por ejemplo, en el prólogo español de El marciano (Andy Weir), el editor
sostiene que mientras que la ciencia ficción se fuerza en imaginar futuros
hacia los que tender, la fantasía es mero escapismo. Y no hay nada más
conservador que el escapismo, es decir, la huida hacia un mundo de ficción que
no nos haga plantearnos ninguno de los conflictos del mundo real.
Sin llegar a tales extremos, podemos
analizar a los autores más conocidos de cada género. ¿Quién es el fundador de
la fantasía moderna? J.R.R. Tolkien, un catedrático inglés católico y
conservador. Este señor es el principal referente hasta que en los ’90 la cosa
empieza a cambiar. Mientras tanto, ¿quiénes estaban definiendo lo que
entendemos como “ciencia ficción”? Isaac Asimov, un hombre que tenía fuertes
discusiones con su editor cada vez que éste le pedía que introdujera razas extraterrestres inferiores a la humana, representada siempre por un
hombre blanco (3). Ray Bradbury, que habló sobre cómo el adocenamiento social
lleva a la quema de libros y describió un éxodo masivo de personas negras a
Marte para evitar la acción del KKK. Philip K. Dick, cuya ideología era un tanto caótica pero desde luego nada conservadora. Ursula K. Le Guin, reconocida anarquista y
feminista. Y podría seguir.
¿Y los temas? El tema tradicional de la
fantasía ha sido la lucha del Bien contra el Mal, así, en mayúsculas y sin
matices. Han tenido que venir Pratchett, Abercrombie, Martin, Sanderson o
Sapkowski, ya en los ’80 y sobre todo en los ’90 y los ‘00, para que las cosas
empiecen a cambiar. Aun así creo que, salvo excepciones, la fantasía más
puntera está todavía reaccionando a ese tropo que tanto la ha lastrado. Todos los
autores que he mencionado, por ejemplo, han escrito historias corales, con
varios protagonistas y puntos de vista, tratando a toda costa de evitar los “malos
muy malos” y los “buenos muy buenos” (4).
Eso es sin duda un avance, pero ¿qué ha
hecho mientras tanto la ciencia ficción? Ha especulado sobre qué es lo que nos
hace humanos, sobre la forma en que nos condicionan el género y la raza, sobre
nuestra relación con el planeta, sobre la vida en comunidad, sobre la cordura, la adicción y
la enfermedad mental, sobre las orientaciones sexuales… en la fantasía no se ha
hecho nada de todo esto. Por poner un ejemplo: existe toda una
corriente de ciencia ficción feminista (Russ, Le Guin, Tepper, Atwood, Sturgeon…),
que habla sobre la condición femenina. En fantasía no hay nada similar: hay
obras de carácter feminista (Las nieblas
de Avalon, de Bradley), pero aisladas.
¿Hablamos de los protagonistas? En la
fantasía más pura tienden a ser chicos jóvenes, procedentes de entornos
humildes, que acaban siendo herederos reales, grandes magos o las personas de
las que habla una profecía. Más adelante, la mayor parte de autores que he
mencionado hace dos párrafos empezó a introducir mujeres en sus historias, que
muchas veces destacan por estar bien escritas. De nuevo, eso es bueno, pero
falta diversidad. Como se pregunta acertadamente Rocío Vega en este post,
¿dónde están los protagonistas discapacitados, ancianos, feos, reales?
Pues, aparentemente, en la ciencia
ficción. Sí, hay mucho campo de nabos entre los protagonistas. Por poner dos
ejemplos, Dick o Asimov nunca escribieron a una mujer que no fuera una
secundaria sin personalidad, un interés romántico metido con calzador o una
antagonista plana. Pero la variedad es infinitamente mayor. Puedo citar sin
esforzarme una docena de obras de ciencia ficción cuyos protagonistas
son mujeres, personas no blancas, gente con discapacidades o ancianos.
Creo sinceramente que mi hipótesis es
correcta. La ciencia ficción es un género más progresista que la fantasía,
tanto por los temas que ha tratado como por la forma en que los ha tratado. Pero
también creo que no es una cuestión esencial, sino histórica. Cada corriente tiene
su historia y sus hipotecas: en el caso de la fantasía, Tolkien y las obras
producidas en serie a partir de juegos de rol han pesado mucho en la evolución
del género. Pero es obvio que estamos en una época de transición: ahora hay
muchos más referentes, y eso es bueno para la diversidad y para romper las
barreras que tradicionalmente han encorsetado la fantasía.
Hora es de ponerse a ello.
(1) En lo personal, y aunque yo no soy el
que importa aquí, Todas Gamers ha hecho que me interese por las novedades del
mercado de videojuegos, algo que nunca pensé que pasaría.
(2) El argumento es estúpido no sólo
porque en una obra de ficción el autor es el dios omnipotente y puede crear el
mundo que le dé la gana, sino porque en realidad la Edad Media (que es un
periodo que vivió un continente entero durante diez siglos) fue mucho más variada de lo que solemos creer. Dejo dos artículos maravillosos
sobre el tema: uno de Delfina Palma y otro de Kameron Hurley.
(3) Luego en su vida diaria era un
machista y un tocaculos en convenciones. Si es que no puedes tener héroes.
(4) Lo jodido es que he hecho la lista
sin pensar en esa característica de sus obras, que me ha saltado a los ojos
cuando he visto todos los nombres puestos uno detrás de otro.
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Creo que has sido un poco superficial. LeGuin precisamente escribio fantasia con algunoss de los tipos de personaje que indicas en sus novelas de Terramar. Y si bien Tolkien era conservador en muchos aspectos, esta claro que escribio personajes que se salian de los roles impuestos como Galadriel o Eowyn, esta ultima rebelandose incluso contra lo que su sociedad le dice que puede o no hacer. Creo que para un hombre nacido en el siglo XIX no estaba nada mal.
ResponderEliminarClaro que el post es superficial: es una entrada de 1.200 palabras que aborda una hipótesis sobre un tema complejo.
EliminarAun así, no me convencen los contraejemplos. Le Guin es una escritora de ciencia ficción, que ha dado rienda suelta a su feminismo, su anarquismo y su pacifismo en este género. Lógicamente, en las escasas incursiones que ha hecho en la fantasía, mantiene su ideología. Pero eso no convalida toda la fantasía de "buenos muy buenos luchando contra malos muy malos porque son muy buenos y los otros muy malos".
Y en cuanto a Tolkien, el hecho de que use el tropo de la "mujer fuerte distinta a los demás" (muy común en fantasía) no hace su obra menos conservadora. ESDLA es una historia épica de señores defendiendo el Bien contra el Mal: salvando el mundo, nombrándose reyes, combatiendo contra monstruos, etc. Sí, mola mucho, pero no es lo que se dice progresista o avanzada.
Lo que separa a ambos géneros es el foco y la mentalidad con la que se abordan las historias. La ciencia ficción es literatura de ideas, de autores que las proyectan hasta sus últimas consecuencias para ver hasta donde nos llevan. Es literatura de especulación y de atrevimientos, de la constante de maravillar al lector con las posibilidades infinitas del futuro. Ningún otro género explora tanto como la ciencia ficción.
ResponderEliminarLa fantasía por otro lado, es la casa de tu abuela en la que crepita una agradable chimenea en invierno. Su enfoque es el romanticismo. Romantización de heroes, de ideales, de villanos. Romantización de paisajes, de la naturaleza, de leyendas. Aunque existe la fantasía oscura en la cual todo dista de ser ideal, la propia oscuridad que inunda su atmósfera está lejos de ser realista. En la fantasía no queremos que nos molesten las consideraciones de la moral moderna, queremos un mundo más sencillo, y juego de tronos no es la excepción por mucho que todo el mundo sea ambiguo moralmente.
*aplaude muy fuerte*
EliminarHas condensado mi entrada en dos párrafos. Sin más.
¿Has leído la diferenciación entre fantasía y ci-fi que hace K. Dick? Es muy interesante. Te dejo un blog donde la he encontrado transcrita: http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/futuro/13-1793-2007-10-06.html
ResponderEliminarP.D.: soy ptraciogg :P
Creo que la había leído, pero siempre es un placer releer las opiniones de Dick. Me parece una distinción sutil y maravillosa.
EliminarSobre Las Nieblas de Avalon y su ideología tampoco se puede hablar excelentemente. Te dejo el artículo de Limyaael al respecto: https://curiosityquills.com/limyaael/feminist-fantasy/
ResponderEliminarAhora mismo, en literatura juvenil, uno de los grandes éxitos españoles es Sueños de piedra, abiertamente feminista. Sí que hay una corriente de escritoras "feministas" de fantasía en inglés desde los 80, como Tamora Pierce o Mercedes Lackley, en cuya fantasía romántica se basó el juego de rol Blue Rose, uno de los primeros juegos que hablaba sobre la igualdad de género, el fin de la heteronormatividad y el racismo y te invitaba a jugar con personajes que no se parecieran a ti.
Aunque yo siempre preferiré la fantasía que presenta un mundo diferente y feminista desde los inicios, sin necesidad de discusión acerca de si las mujeres esto y los hombres esto otro. Un mundo en el que las mujeres y los hombres hacen lo que quieren y el lector se encuentra con él desde el principio, sin sexismo de paja para demostrar lo malo que es.
Interesante el enlace, gracias :) Supongo que ninguna obra es perfecta.
EliminarY me apunto las recomendaciones que me haces. No conozco a ninguna de las autoras que nombras, pero supongo que es como pasa con la ciencia ficción feminista, que salvo Le Guin no hay ninguna autora famosa de verdad.
"Dick o Asimov nunca escribieron a una mujer que no fuera una secundaria sin personalidad"
ResponderEliminarAquí quedaría mejor: Describieron
Aparte de eso, que no tiene mucha importancia, no has leido bastante Asimov si dices eso
Por otra parte, y fuera del hilo, Asimov se descojonaría del sistema de detección de robots que tiene este blog
EliminarSí, escribí ese párrafo demasiado rápido y no me vino a la cabeza el personaje de Susan Calvin. Personaje que, junto con los dos o tres personajes de Asimov que escapan a esa descripción, es absolutamente atípico en su obra. Pero bueno, asumo que el "nunca" es un error y en la versión final de la entrada (que envío en pdf a mis mecenas del Patreon) ya está matizado.
EliminarMe ha gustado el post pero creo que el enfoque que le has dado es en exceso superficial y que has pecado un poco de algunos tópicos.
ResponderEliminarVoy a centrarme en el punto que más discrepo: "una trata sobre el pasado [fantasía] y la otra sobre el futuro [cf]". Esto es cierto si nos fijamos en determinadas ramas de cada una de ellas y en determinados autores. Si consideramos a la Fantasía como un derivado de la espada y brujería de Robert E. Howart y de la fantasía épica de Tolkien, que posteriormente evolucionó a través de la dragonlance y derivados indudablemente que tratará sobre el pasado, pero creo que tener esa visión de la fantasía es demasiado reduccionista. Ahí fuera hay obras de fantasía que tratan nada o muy poco sobre el pasado, antes y después de esos dos autores: Alicia en el País de las Maravillas, la literatura de China Mieville,Sandman/Lucifer, La Divina Comedia, El Rey Amarillo, Borges, la fantasía urbana y un largo etc de autores y subgeneros.
De la misma manera, aunque es más complicado encontrar ejemplos, la ciencia ficción no tiene porque mirar hacia el futuro, obras como Mad Max: Fury Road es una ventana al pasado desde el futuro (y básicamente casi todo el genero postapocalítico), Warhammer 40K es en esencia cruzados con manipulación genética y servoarmaduras o El Libro del sol nuevo de nuevo, que es ciencia ficción que mira al pasado y ya que estamos Abercrombie con la saga del Mar Quebrado también podría encasillarse aquí (aunque esto es discutible).
PD: Ya que mencionas a Le Guin me parece increíble que no menciones los cuentos de Terramar!
Sobre la superficialidad y Terramar, mira mi primera respuesta.
EliminarSobre lo otro, es cierto que todo lo que nombras al final de tu segundo párrafo es fantasía. No se me ocurrió categorizarlo como tal porque, o bien son obras relativamente "nuevas" (es decir, se enmarcan en el proceso de renovación que menciono algunas veces en el post) o bien son cosas tan alejadas del entorno friki (como "Alicia" o "La divina comedia") que no pensé en ellas.
Me alegro de que twiter sirva par algo bueno, porque todo lo que me llega son los TT "las gordas no pueden ser felices" o "no más feminismo".
ResponderEliminarTwitter tiene muchas mierdas así, pero también cosas súper chulas ;)
EliminarMás que porque esté de acuerdo o no con el artículo (me parece que te metes en un berenjenal imposible de solucionar en tan poco espacio), te comento porque es un tema que me apasiona y me gusta ser la sal de todos los platos.
ResponderEliminarMe parece que Rata da en el clavo con que, más que analizar a sus autores, la clave para entender ambos géneros reside en su origen, en el momento. Aunque podemos considerar Frankenstein como piedra angular de la ciencia ficción, el verdadero pilar de esa catedral es H. G. Wells. La fantasía heróica contemporanea se define a partir del romanticismo, con miras puestas en un medievalismo gótico. Wells no tiene nada que ver con eso, es un pensador mucho más "ilustrado" que tiene más que ver con Dickens que con la obra de Shelley.
Los referentes anteriores al XVIII de cada uno son totalmente distintos. La fantasía bebe de las novelas de caballerías, la mitología y en algunos casos, de la novela picaresca y del terror. La ciencia ficción se mira en reflexiones políticas de Tomás Moro, en la fantasía positivista de Verne y en la novela de aventuras liberal de la Ilustración.
No creo que se trate tanto de si Tolkien era conservador o no sino de qué ha leído el autor de cada género más allá del mismo. Luego pasa que muchos autores actuales no tienen referentes fuera de su zona de confort y vomitan conceptos ya vistos, y es especialmente flagrante en la fantasía. Pero me parece interesante que, dentro de la fantasía, haya tenido que venir un autor de ciencia ficción como G.R.R.M. para dar un poco de color al género.
Tus comentarios siempre son interesantes ;) Apenas sé qué responder, porque me parece muy sugestiva la idea de que no depende tanto de la ideología del autor como de sus lecturas. Pero supongo que es un proceso que se acumula, ¿no? Cada género tiene su tradición y hace falta un revulsivo para mover de ahí a la mayor parte de autores.
EliminarHe seguido los enlaces (y los enlaces de los enlaces, hasta que me dio la una y me tuve que acostar) y decian en uno que en principió Aragorn tenia que ser una princesa, pero al final Tolkien no se atrevió porque pensó que no lo publicarian. Que gran oportunidad perdida... De todas formas Bilbo tenia más de 50 años cuando se fue de aventuras y Frodo al menos 33, que ya rompe con el tópico del joven heroe. Por no hablar de Willow, aunque ese es del cine.
ResponderEliminarCurioso lo de Aragorn. Es alucinante pensar que, si Tolkien se hubiera atrevido, toda la fantasía posterior habría cambiado.
EliminarAmbos, tanto Bilbo como Frodo, parten de aventuras en su cincuentena. Pero piensa que la mayoría de edad en los hobbits está en 33 años, así que con 50 son aún relativamente jóvenes.
http://www.caninomag.es/los-personajes-femeninos-examen-6-herramientas-evidenciar-sexismo/
ResponderEliminarEs interesante analizar las peliculas con estos tests. Estaba viendo Tarzán y mi conclusión:
-Bechdel: No, la única conversación entre personajes femeninos es Terk diciendo "hola tia Ka" a Kala. No lo doy por bueno.
-Mako Mori: Bueno, como Jane estaba en la selva para estudiar a los gorilas y no abandona la idea en toda la pelicula, lo doy por bueno.
-Lampara: Como es por su insistencia en conocer a los gorilas que ellos son capturados, su personaje es más relevante para la historia que una lámpara. Lo doy por bueno.
-Fuerza relativa: No diria que Jane es especialmente fuerte, pero lo doy por bueno por Kala, que se enfrenta a toda su familia para adoptar a Tarzán.
- La mujer en la nevera: Lo pasa. Aunque Jane y Kala son capturadas, tambien todos los demás.
-Test de Furiosa: Que yo sepa el único boicot es el que hicieron en Israel porque sale un hombre en taparrabos, asi que no.
Comentarios: Me molesta que Jane vaya a volver a Inglaterra y tenga que ser su padre el que la anime a quedarse porque está enamorada. Si no dice nada ella se hubiera ido. Muy mal.
Es más complicado de lo que parece.
No he visto Tarzán, así que te creo xD No conocía el test de la fuerza relativa, muy interesante :)
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